Los nazis durante el Holocausto, el periodo de exterminio de
los judíos por parte alemana para que solo existiera en sus fronteras la raza
Aria, no tuvieron piedad ni con los pobres niños judíos. Los campos de
concentración alemanes esconden historias estremecedoras de niños cuyas
historias conocemos gracias a libros y al cine, en el caso de Ana Frank y su
diario en el que cuenta su historia.
Luego,
gracias a algunas películas, podemos saber el calvario que pasaban los niños en
los campos de concentración. Aunque sean ficticias, cuentan una realidad triste
de cómo unos inocentes niños no tienen derecho a vivir por ser de “Otra Raza”.
ANA FRANK
(1929-1945):
Fue una
niña alemana con ascendencia judía, mundialmente conocida gracias al Diario de Ana Frank, la edición de
su diario íntimo, donde dejó constancia de los casi dos años y medio que pasó
ocultándose, con su familia y cuatro personas más, de los nazis en Ámsterdam (Países Bajos) durante la Segunda Guerra
Mundial Su familia fue capturada y
llevada a distintos campos de concentración alemanes.
El
único sobreviviente de los ocho escondidos fue Otto Dix, su padre. Ana fue enviada al campo de concentración nazi de Auschwitz
el 2 de
septiembre de 1944 y, más tarde, al campo de
concentración de Berguen-Belsen, donde murió de tifus alrededor de mediados de febrero de 1945, unos dos meses antes de que fuera
liberado.En 1947, apenas dos años después de terminada
la guerra, Otto publicó el diario bajo el título La Casa De Al Lado
GIOUSE (niño de: La vida es bella)
Es una
emotiva historia, ambientada en la Italia de la Segunda Guerra Mundial, en
donde un hombre italiano-judío Guido Orefice, es llevado al campo de
concentración junto a su pequeño hijo de seis años. Durante el desarrollo de la
historia, se puede ver cómo este padre hace lo humanamente posible no sólo para mantener a
su hijo a salvo, sino para ocultarle la terrible crueldad que los rodea, recreándole
otra situación.
Le
decía que cuando los alemanes iban a matar a los judíos, él se tenía que esconder. Era un
JUEGO. Jugaban a que había malos que querían atraparles y estos se tenían que
esconder para ganar puntos para al final conseguir un tanque. Si resistía
callado y no le pillaban, entonces ganaba pruebas poco a poco y con eso puntos.
Cuando mandaban desfilar a Guido, él
andaba parodiando a los soldados para no hacer ver la situación al niño y que
se riera. (El final no lo cuento…)
Bruno,
de ocho años, es el hijo mimado de un oficial nazi. Al ascender a su
padre, la familia se ve obligada a abandonar su confortable casa de
Berlín y trasladarse a una zona aislada donde el solitario chico no tiene nada
que hacer ni nadie con quien jugar. Muerto de aburrimiento y atraído por la
curiosidad, Bruno hace caso omiso a lo que su madre le dice. No debe ir más
allá del jardín bajo ninguna circunstancia. Pero él no le hace caso y se dirige
hacia la 'granja' que ha vislumbrado en la distancia. Allí conoce a Samuel, un
chico de su edad que vive una extraña y paralela existencia al otro lado de una
alambrada. El encuentro de Bruno con el chico del pijama de rayas le lleva a
adentrarse de la forma más inocente en el mundo de adultos que les rodea.
Entabla una amistad con Samuel con terribles consecuencias.
Conclusión:
Es una
lástima que tenga que estar haciendo una entrada de un grupo de locos a los que
les dieron por EXTERMINAR a una raza simplemente porque eran “malos”, no eran
rubios de ojos azules. Se hacían llamar Nazis y pasaron a la historia por estos
genocidios donde maltrataban, no daban de comer y luego quemaban vivos a una
raza, JUZGAD VOSOTROS… para eso está la historia, para no volver a cometer crímenes como estos en el futuro.